Es curioso como cuándo…
creemos en nosotr@s mism@s...
cuando lo tenemos claro…
somos imparables…
Para lo bueno y para lo malo.
Cuántas veces se nos mete
en la cabeza ideas descabelladas
y las creemos a pies juntillas…
sin datos fehacientes… constatables…
Sólo que hemos hecho
un relleno patatero
en todos los huecos dónde
no teníamos información.
A veces los datos que nos faltan…
son del otr@...
y una posible forma de solucionarlo…
es ir a preguntarle…
Parece tan sencillo ¿Verdad?
pero no lo es tanto.
Porque cuándo vas a preguntar
convencid@ de la respuesta…
de poco sirve lo que el otr@ diga.
O pudiera ser y es muy probable que
el otr@ se sienta invadido.
Pero también hay veces que
tenemos vacíos de nosotr@s mism@s…
O incluso peor…
espacios rellenos con información que
tiene muy poca consistencia.
En definitiva un relleno muy pobre
de lo que verdaderamente somos.
Y eso nos conduce a vivir una vida
muy carente de sentido.
Sería cómo endulzar al café…
con pimienton de la vera…
Qué será muy bueno pero…
no es su mejor función.
Deja de hacer rellenos…
facilones… simplistas que
te llevan a una versión
desempoderada de ti mism@.
¿Qué cómo se hace eso?
Pues con mucha práctica.
Parándote a escuchar
aquello que te cuentas…
Aquello que suena dentro de ti…
versiones tanto añejas como ajenas.
Y empieza a amarte
en las malas y en las buenas.
Enamórate de ti… del otr@...
del aire… de la música que suena…
No encuentro otro modo más sencillo…
económico que...
No encuentro otro modo más sencillo…
económico que...
amar lo que a nosotr@s llega.
Imagen:thisiscolossal.com
aunque esta pagina esta dentro de mis arcas, espero que se pueda enviar este "comentario" hacia Ud. mercedes, y que no quede a Merced del mundo net.
ResponderEliminaratte
el añejo
Así es, me llega a mi. Y agradezco tus comentarios. Muchas gracias
Eliminar