#coachingproactivo
A veces 
nos encontramos
 sumergid@s en vorágines que
duran tanto tiempo
y han sido tan 
lentas en su progresión que
no nos damos cuenta
de los costes que
están suponiéndonos.
Fue pasando un poquito…
y se dejó pasar…
Luego otro poco…
y siendo tan poco
quién iba a decir algo.
Y así entró la otra mijilla…
y detrás de ella miles 
de medidas pequeñitas…
sutiles… insignificantes que
formaron muy poco a poco…
muy lentamente esta
situación que no soportas
porque sientes que
no te hace bien… 
no te libera… 
no te empodera… 
no te desarrolla… 
no te hace crecer…
en la dirección que deseas
No te sientes útil… valios@...
en aquello que
andas involucrad@.
Si aún con todo eso
no te mueves de dónde estás.
atiende porque podrías
tener un enganche emocional.
Pero se te ha inoculado 
tan poquito a poco que
no dejas de reprocharte que
es cosa tuya que
tampoco es para tanto 
Pero llegas a casa
y estás agotad@…
sin ganas de salir…
con deseos de recluirte…
no ver a nadie… desmotivad@…
Y así haces un suma y sigue…
un copia y pega cada día…
Si es tu caso… 
si te resuena… te toca… 
te ha despertado
alguna sospecha… 
te ha dado alguna pista…
SÍGUELA…
No vivas de cara
al viento que 
te impulsa hacia atrás…
Vira… despliega alas…
enciende motores 
Si hace falta…
pide ayuda…
llama a salvamento…
Estás encallad@...
y quizás sea hora de 
salir en el bote 
de emergencias…
o a nado…
o pedir un helicóptero…
No sé cada un@...
debiera encontrar
su manera 
más amable y noble
de salir de dónde
su presencia no supone
una celebración cotidiana
de agradecimiento vital.
Imagen: pinterest
