miércoles, 7 de noviembre de 2018

EN ESTADO SER ESTAR AMAR

EN ESTADO SER ESTAR AMAR
#coachingproactivo
Existen una o varias
razones de ser
universales
Y cada un@ tenemos
interpretaciones variadas
de lo que suponemos son
esas razones universales.
¡No tenemos ni puta idea!
Habrá algun@s que
estén más cerca…
la mayoría en las antípodas.
Lo digo basándome en
el estilo de vida que llevamos…
“Calle… obedezca y haga”
Podría ser el tÍtulo de una película.
¿Qué razón universal de mierda
iba a querer que 
malgastáramos nuestras vidas 
llevando a cabo las pajas mentales 
de un@s poc@s atronad@s?
¿Hemos perdido el deseo
el instinto… la sangre caliente?
Qué nos pasa por dentro
para ser capaces de soportar
basura ajena y colocarla en 
el salón de tu casa.
¿QUÉ NOS PASA?
Porque algo nos pasa…
Y ya no es miedo…
al menos no sólo…
ni lo más significativo
Es desgana… es desazón…
es desidia… es desilusión…
¡ES ATROZ!
Es permitir que pase lo peor 
pero que pase pronto
Es haber perdido
no las ganas de luchar…
sino peor
la capacidad de imaginar
algo mejor.
No es haberse rendido…
es haber sucumbido…
Es haber vendido tu alma
al mejor postor que
siempre pagan poco y mal…
No te enfades 
con lo que te rodea
por muy insoportable que
te parezca
te roba energías para
tu estrategia secreta
Pregúntate porqué
no haces las maletas
y tiras millas...
un viaje interior quizás
más que fuera.
“Nadie que no sepa aullar
encontrará su manada”
No demores ni un segundo
la búsqueda de tu paz.
Aún en las circunstancias 
más hostiles aquel que
busca con verdadera fe
disciplina… nobleza…
encuentra.
El lugar de fuera… 
el contexto…
lo que nos rodea
es lo de menos…
si le das importancia
le das poder.
Lo importante es que
tú estés contigo en tu centro
Eso no hay imbécil suelt@ 
capaz de insuflarle miedo.
Mantente contigo…
es el lugar más seguro
del universo.
Nadie que 
tenga malas intenciones 
es capaz de atravesar 
el aura que 
un ser humano crea
en estado de SER.
Porque sólo tú
de manera conscientes
abres y dejas pasar…
o despachas raudo y veloz
a quien viene a importunar
Y te quedas tan anch@
dando bienvenidas…
como hasta nunca.
En ese estado
la gilipollez ya…
no perturba
Imagen: Costa Dvorezky