jueves, 23 de enero de 2020

MUERDE LA MANZANA

MUERDE LA MANZANA
(De una vez por todas, envenena más la duda en bucle que el mordisco)
Quien soy yo según sea el otr@ o el contexto
es una decisión personal e intransferible.
Tiene poco sentido preguntarse
¿Qué debería cambiar el otr@ u otr@s
para que yo me sienta bien o mejor?
Y no sé a vosotr@s
pero a mi me pasa en automático
más a menudo de lo que me gustaría.
Si algo que estoy viviendo…
sintiendo… percibiendo…
no me hace bien
ponerlo en manos ajenas
esperando lo solucionen
es una trampa que
no sólo no resuelve
sino empeora
y hasta cronifica.
Muy probablemente…
este apetitoso emplatado
solemos servirlo con un aderezo
que hace más contundente el bocado
¡No informar al “presunt@”!
Porque presuponemos
se habrá dado cuenta
del mal causado
Peligrosa palabra
PRESUPONER.
Medalla de oro…
compartida con
EXPECTATIVAS.
Entre lo que presupongo y espero
¿Dónde quedamos?
En un limbo cuanto menos.
Nadie puede resolvernos
lo que por dentro
nos anda pasando
Y es cuestión de amor
Pero no del otr@
sino propio
Cada un@ debiera AMARSE
Y amarse para mi es
sentirse libre… confiad@...
Sin crearse culpa…
Sin hacerse daño…
Sin temer represalias
Sin temer ser excluid@…
rechazad@… invisibilizad@...
Donde no hay miedo a equivocarse
porque equivocarse es un regalo.
Un regalo que sólo disfrutan
aquell@s que dan el salto.
Saltemos al vacío…
hay un espacio infinito de amor reservado
deseando acurrucarnos
Tú sabes bien cómo dónde y cuándo…
Cierra los ojos… respira…
déjate hacer… déjate llevar…
está todo perfectamente planeado
AHORA
es un momento apropiado.
Todo está disponible para ti
para cuando quieras usarlo
Imagen: pinterest