martes, 5 de febrero de 2019

COLOR DE HOGAR

COLOR DE HOGAR
#coachingproactivo
Entre todo lo que
callamos… decimos…
sentimos… pensamos…
vemos… oímos… tocamos…
podemos hacer…
la comprensión que
nos de la gana.
No hay nadie 
en el mundo que
pueda intervenir
y realizarla por nosotr@s.
Podemos crear algo que
nos limite o nos amplie…
nos haga sufrir o
nos de energía…
PODEMOS pero
¿Qué nos impide decidir hacerlo
de una manera sana…
ecológica… de calidad?
¿Qué nos impide abordarlo
objetivamente?
En gran medida quizás…
el miedo a que te señalen
y quedes fuera de la plebe…
te mueras de frío y soledad…
Y pienso que
no hay lugar más gélido…
solitario y sombrío que
vivir a la sombra de lo que
verdaderamente sientes.
Así que lo que temes suceda…
de alguna manera 
ya está sucediendo
y no quieres darte cuenta.
Puedes vivir así
tu vida entera…
No serás la única…
ni la primera…
Formarás parte de 
la gran masa que
en lugar de VIVIR…
sobrevive…
Si esa es la manera que
eliges para estar aquí…
adelante…
haber elegido da sentido.
Si aún no te has parado…
a notarte… sentirte…
y poner dirección
no te demores mucho…
el tiempo no corre a tu favor…
si no estás contigo.
Nada de lo que haces
cobra sentido hasta que
tú se lo das.
Te mereces lo mejor que
puedas darte
Pon rumbo a tu mejor versión…
hoy mismo… ahora…
en este instante…
Estás a un pensamiento
de una vida apasionante.
Imagen: pinterest

A POR LOS ARPEGIOS

A POR LOS ARPEGIOS
#coachingproactivo
Llega un momento que
tomas conciencia que
no crecerás más 
en estatura que
tu número de pie
está estabilizado que
la forma de tus ojos
el grosor de tus labios
el color de tu piel
no cambiarán 
a no ser por
agentes externos.
Llega un momento que
te das cuenta que
muchas cosas 
no van a cambiar 
a más ni a mejor
según tus cánones
de pensamiento
mas bien a menos…
más gastado… más viejo…
Y te enamoras de ello.
Porque al mismo tiempo
descubres que lo que
verdaderamente
hace que tu vida
sea más plena…
más amable… 
más divertida…
más intrépida…
más de lo quieras…
o menos de lo que desees…
sigue estando 
en perfecto estado
de ser transformado.
Y afinas…
el modo de hacerlo…
Dejas de apretar
el entrecejo de
morderte labios y uñas…
Dejas de estar 
en un desvelo…
para pasar a un tiempo
de paz... de escucha
contigo… con tu cuerpo…
con tu mente…
con tus pasiones...
con tus miedos...
Son tiempos de 
recogida frutos
y valoras a cada uno de ellos.
Los dulces... los amargos…
los grandes… los pequeños…
los ausentes… los excedentes…
Y todos y cada uno 
encuentran su hueco…
No se estorban… se acompañan…
se equilibran… se reconocen…
y forman una orquesta
mágica… inclusiva… poderosa…
Donde se sabe que
incluso la nota 
más desafinada
es parte fundamental…
imprescindible… necesaria…
auténtica… genuina…
de cada sinfonía que
creas en tu día a día
a cada momento.
¡Qué suene la música!
¡Qué baile tu cuerpo!
Imagen: pinterest