#coachingproactivo
Te imaginas a un ave
anidada en un árbol…
que ha perdido las hojas…
Que ya no lo protege del viento
del sol… de la intemperie de la noche…
Y que aún así permanezca en él…
por miedo a no encontrar otro…
más apropiado para pasar sus días…
en un bosque poblado de árboles.
Te imaginas a ese ave…
pasando frío… calores… fatigas…
Qué pensarías…?
Cómo entender que…
habiendo tantos árboles…
de distintas vegetaciones…
alturas… grosores…
el miedo a no encontrar
algo mejor le retuviera
el resto de sus días
en un lugar que no le cobija.
Quizás tu mires el bosque…
y tengas la evidencia
de la abundancia de posibilidades…
pero él no lo ve…
Y para ti es evidente… palpable…
tangible… pero él no lo ve…
Seguramente eso…
difícilmente le pase a un ave…
Pero a la especie humana…
continuamente…
El miedo a abandonar algo que…
no te nutre… pero te alimenta…
Algo en muchas ocasiones desconocido…
que te consume las ganas… las energías…
la ilusión de vivir la vida en plenitud…
Pero no lo dejas… no te marchas…
No te maltrates demasiado…
ocurre en las mejores familias…
Sigue deseando eso que deseas…
sigue haciendo cosas que te acerquen
a ese lugar soñado…
Porque quejándote… lamentándote…
victimizándote… no llegarás… creo…
Piensa que este camino…
justo este que estás haciendo…
este que a veces sientes que te estruja… te aniquila…
es ni más ni menos el que te hará llegar…
a ese lugar “perfecto”... otro nivel de pensamiento
(Continuará)
(Imagen: flickr)
